El eucalipto es un impresionante árbol de hojas perennes que puede llegar hasta los 60 metros de altura. Las hojas de la variedad macho tienen propiedades medicinales. Con ellas se preparan remedios naturales expectorantes, balsámicos, astringentes y antirreumáticos.
Las hojas contienen un aceite de composición variable pero que generalmente contienen cineol (eucaliptol) como componente mayoritario. Presentan además taninos, ácidos gálico y elágico, un principio amargo, resina, cera y una sustancia de actividad bacteriostática.
Recolectar las hojas en cualquier época, para consumir frescas o secas, en este último caso, secar a la sombra y en lugar aireado o con calor artificial a no más de 40 ˚C.
Especialmente interesante es su capacidad para ayudar a curar el resfriado y su poder expectorante. Con tan sólo 20 gramos de hojas de eucalipto podemos preparar una infusión que toma caliente y con miel, tres o cuatro veces al día, nos suavizará muchísimo nuestros problemas respiratorios, como resfriado, gripe y bronquitis.
Las inhalaciones de vapor de eucalipto son un gran remedio para estos mismos problemas respiratorios e incluso para un ataque de asma. Se hacen tan sencillamente como poniendo a hervir 40 gramos de hojas de eucalipto en un litro de agua y luego respirando profundamente su vapor cubiertos por una toalla.
El eucalipto medicinal tiene muchas propiedades curativas a nivel antiinfeccioso, antiinflamatorio, antiespasmódico y de control de la diabetes, así como también está recomendado para el alivio de los síntomas del reumatismo (mediante baños de inmersión), e incluso las infecciones urinarias, dado su poder antiséptico.
Finalmente, también puedes utilizar las ramas y hojas de eucalipto para purificar el ambiente de alguna habitación donde han sido personas enfermas o donde haya habido una gran cantidad de insectos, ante los cuales reacciona como repelente.
Cocinar con eucalipto es un arte delicado, ya que puede ser perjudicial si se ingiere antes de cocinarlo. Las especialidades con eucalipto han sido desarrolladas por cada uno de mucha gente desde chefs experimentados hasta pescadores locales, utilizando la hoja para realzar el sabor de los alimentos.
Ahumar con eucalipto. En Portugal, es una práctica común entre los pescadores cocinar sus capturas en un fuego de carbón después de colocar un ramo de hojas de enebro en el interior de la cavidad limpia de los peces. Cerca del final del tiempo de cocción, una hoja de eucalipto sumergida en agua de mar sobre las brasas le da un rico sabor ahumado a la presa fresca.
Preparados a base de hojas o aceite esencial de Eucaliptos, no deben administrarse por vía oral, ya que pueden provocar dificultades respiratorias y hematuria. El aceite puro irrita las mucosas gástricas y causa cianosis y convulsiones.
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